Cuiden a los Niños

A QUÉ HUELEN LAS NUBES? (o a grandes males, grandes remedios)-.

La katxi dedica horas y horas de su día, principalmente la tarde, a estudiar esta cuestión que interesa desde hace años a un par de publicitarios. Su terrario huele a gallinas, de palo, las nubes, ni lo sabe. Sólo las busca con la vista desde el calor de su piedra de arcilla más seca que sus escamas. Las nubes, ajenas a tal vigilancia, se forman, crecen y deambulan a sus anchas por el cielo de Oviedo. Hacia ya van, hacia León, mas no creo que lleguen. Y mejor si no lo hacen, porque como lleguen a la meseta les espera una ración de la vena más pepera de Gallardón. Pobrecillas, con su tacto de algodón y olor a compresa sobrevuelan el cielo de la comunidad madrileña mientras el alcalde celebra con orgullo su fiesta importando ideas israelíes demostrando su acercamiento a posturas más aznarianas. Postura habitualmente genuflexa y carigacha ante mr. Bush y sus amigos del muro. Y mientras las nubes se niegan a llover sobre la otra nube que cubre la capital del estado la administración les prepara una duchita de yoduro de plata para cebarlas y sacrificarlas. Y me veo a los murcianos, por poner un ejemplo, comprando a Chaves cazabombarderos para bombardear cualquier nube que pillen y todas las comunidades comencemos a pelearnos por la propiedad de cad cumulonimbo. A qué huelen las nuebes? No sé, sólo sé que la mayoría son de Asturias, que hace que no vemos el sol 3 semanas.

Hay que joderse, señores. Fue Federico Trillo, o Fraga, o nosequién el que recomendó bombardear el Prestige en alta mar? Casi lo mejor sería organizar un bolo a coro de King Africa y Chimo Bayo, porque como sigamos por este camino...